DESCUBRE TU CLÍTORIS

Succionador para el clítoris, estimulador para el clítoris, masajeadores para el clítoris… Hay infinidad de juguetes eróticos destinados a lograr el orgasmo a través de este (no tan pequeño) órgano sexual. Pero ¿qué sabes realmente acerca del clítoris? Sigue leyendo…

El clítoris

El clítoris es un órgano que, como la mayoría de lo relacionado con la sexualidad femenina, ha sido relegado hasta no hace tanto a un segundo plano por la comunidad científica.

De hecho, hasta su origen etimológico está disputa. La palabra clítoris deriva del griego y según algunos filólogos proviene de “kleis” o llave, que abriría las puertas al placer.

Sin embargo, otros creen que la palabra clítoris procede de “kleitýs” que significa colina por el aspecto anatómico del glande similar a un montículo.

Pero vayamos al meollo. ¿Cómo es tu clítoris?

Comencemos haciendo un pequeño repaso a la anatomía del clítoris.

Este órgano de forma cilíndrica tiene cinco partes, formadas por tejido nervioso y tejido eréctil.

Por un lado tenemos dos bulbos que envuelven a la uretra  y a la vagina y por otro, los cuerpos cavernosos. Están unidos por el tronco del clítoris. Miden aproximadamente 10 cm de longitud.

Como elemento impar está el glande que es la única parte visible y mide entre 1 y 2 cm.

Los labios menores se unen por delante de él y lo abrazan formando el capuchón o prepucio del clítoris, que sirve para proteger el glande.

Cuando el clítoris es estimulado, los cuerpos cavernosos se llenan de sangre e hinchan este órgano provocando la erección del glande, que sale de su capuchón (igual que ocurre con el pene).

¿Cuál es la función del clítoris?

Su única misión es provocar el placer sexual en la mujer. Esto se debe a que los nervios que producen el placer sexual están concentrados en el clítoris a través de unas 8000 terminaciones nerviosas aproximadamente.

Recientemente, algunos estudios sugieren que el clítoris interviene en el proceso de fecundación. Esto se debería a que el orgasmo producido por el clítoris produce a su vez contracciones en la vagina que facilitarían el ascenso del esperma hasta las trompas de Falopio.

Tipos de estimulación

Puedes ir al grano y estimular el clítoris de forma directa a través del glande.

Sin embargo, hay personas que tienen una alta sensibilidad en la zona por lo que este tipo de estimulación es excesiva e incluso desagradable para ellas. En este caso, lo recomendable es la estimulación indirecta a través del capuchón que recubre el clítoris y evita el contacto directo, reduciendo la sensibilidad.

Otra forma de estimulación indirecta es a hacerlo de forma interna a través de la vagina, estimulando la zona G. Se encuentra en la pared frontal vaginal, a unos 3-5 cm de la entrada de la vagina y que confluye con la zona final del clítoris.

Orgasmo clitoriano

Llegados a este punto y teniendo en cuenta todo lo anterior, podemos afirmar que no existen dos tipos de orgasmo (clitoriano o vaginal) sino uno solo que proviene del clítoris.

¿Recuerdas la anatomía del clítoris? El orgasmo “vaginal” no es otra cosa que el orgasmo producido en la zona del tronco del clítoris que abraza la vagina, es decir, el punto o zona G.

Elige juguete para tu clítoris

Ahora que conoces un poco más a tu clítoris, es momento de elegir el juguete según el tipo de estimulación que prefieras.

Si eres de las personas que prefiere una estimulación directa tus opciones peden ser un masajeador de clítoris o un succionador de clítoris, ya que actúan directamente sobre el glande.

Si quieres algo más sutil para una estimulación indirecta y más suave puedes optar por una bala vibratoria (para masturbación) o un anillo vibratorio (en el caso de querer estimulación durante el coito).

Para una estimulación interna existen juguetes diseñados específicamente para el punto G.

Esperamos que este post te sea útil. Si necesitas más información puedes contactar con el equipo Placerótica, estaremos encantadas de ayudarte y resolver tus todas dudas.